Desde que en Junio de 1965, después de muchos años dedicados al negocio de la joyería al por mayor, Gerardo Fernández Penín y su hijo Francisco Fernández Gómez, deciden instalarse en el nº 49 de la emblemática calle Real de La Coruña con una tienda de 50 m², intentan y consiguen acercar a los coruñeses todas las novedades que aparecen en el sector.
Para ello acuden de manera asidua a las mejores ferias en Suiza, Italia y Francia en donde se encontraban un mundo muy distinto a la realidad de España, arriesgándose con artículos que en aquel momento eran demasiado modernos para nuestro país.
Y es que FRANERMY desde sus comienzos tuvo claro la decisión entre seguir la norma generalizada de vender siempre los mismos artículos con diseño tradicional y el éxito asegurado o lanzarse a un mundo de novedades que venían de otros países. Su baza ganadora fue ofrecer al público coruñés conocedor y amante de lo joyería de actualidad, un producto innovador que sólo podía encontrar en las revistas o en sus viajes al extranjero.
FRANERMY siempre ha sido un marco para los mejores creadores de joyas tanto gallegos como españoles y de todos aquellos países que han dado lo mejor y más selecto de la profesión.
Famosos se hicieron sus escaparates, lejos de aquel terciopelo negro sobre el que se colocaba el muestrario que permanecía inalterable a lo largo del año. FRANERMY decide innovar y a la hora de hacer sus escaparates, los renueva cada 30 días alejándose así de la tradicional concepción de expositor.
Por eso desde su fundación, FRANERMY se convirtió en paso obligado de todos aquellos que querían estar al día en lo que a joyería se refiere; se trataba de una tienda distinta. Fue precisamente esa distinción, ese valor de traer las últimas tendencias, esa calidad e innovación que siempre tuvieron sus piezas los que lograron que la joyería se crease una clientela propia y selecta, que se distingue por ser muy exigente y buscar sólo lo mejor, tanto en calidad material como en diseño.
En 1982 Francisco Fernández Gómez, con la inestimable ayuda de su mujer Lila Iglesias, acomete la primera gran reforma de su establecimiento creando una tienda mucho más moderna y atractiva en la cual se realizan grandes exposiciones de joyería de las mejores firmas y se distribuyen las mejores y más selectas marcas de relojería a nivel mundial.
En 1997, después de terminar sus estudios de Derecho, se incorpora Francisco Fernández Iglesias, la tercera generación de este negocio familiar que aprendió de sus padres y abuelo que tan importante es el producto como las personas que lo adquieren y que la labor bien hecha y a conciencia se ve reflejada en esos clientes de toda la vida, en sus hijos y en sus nietos que son los nuevos compradores. Conoció que el principio que debe seguir es el de tener al cliente satisfecho no sólo con la calidad del producto que ofrece sino con el servicio y la atención personalizada.
EN 1998 se acomete la 3ª reforma del establecimiento centrándose fundamentalmente en la fachada exterior pequeños detalles interiores.
El gran salto llega en 2005 tras la repentina muerte del alma mater del negocio Francisco, y de la mano y con el apoyo de su madre y hermanos Francisco hijo se aventura en el traslado de la tienda al nº 13 de la misma calle Real en un establecimiento de 150 m2 para dotar a la empresa de un marco de trabajo mucho más cómodo y generoso donde atender mejor a su gran clientela, pero sin perder ni un ápice de las premisas de calidad, innovación y atención con las que JOYERÍA FRANERMY se fundó en 1965.
Desde el año 2011, y tras haber terminado su formación en Ciencias Empresariales y trabajar en empresas del sector financiero en Madrid, regresa al negocio familiar para incorporarse a la gestión, David Fernández, nieto e hijo de los fundadores Gerardo y Francisco.
FRANERMY no sólo se abastece de sus proveedores sino que además cuenta con unos talleres donde los mejores profesionales del gremio realizan una parte muy importante del trabajo. No sólo transforman piezas para actualizar su diseño sino que diseñan sus propios modelos para su venta o por encargo de sus clientes así como arreglos.
Igualmente, se prestan servicios de gemología e importación de diamantes y todo tipo de piedras preciosas.
En la actualidad después de 50 años siguen ofreciendo lo mejor del sector a una clientela cada vez más exigente. Un establecimiento que atrae al conocedor que busca con tranquilidad lo que quiere dentro de la mejor calidad.
FRANERMY sigue ampliando la linea de joyería y relojería dirigida a una clientela sofisticada y con estilo.
Materiales nobles como el oro, la plata y el platino, las mejores piedras preciosas y los relojes más selectos desde los más asequibles a los más exclusivos.
Hoy afrontan los nuevos retos del mercado acercándose a las nuevas tecnologías con un nuevo y recién estrenado sitio web dotado de una útil y atractiva tienda virtual desde la que seguir ofreciendo su amplio catálogo de productos y con presencia en las redes sociales con su propia página de Facebook e Instagram.